Energía, agua, oxígeno...¿Qué haría falta para que hubiese vida en Marte?
Lo que la Nasa anunció como la resolución de un gran misterio fue al final "evidencias que apoyaban decididamente" una hipótesis. La expectación, claro, estaba por las nubes, de forma que los resultados presentados, aunque notables, dejaron cierta sensación de decepción. El que más y el que menos estaba esperando el anuncio de vida marciana.
Nada de eso dijo ayer la agencia espacial estadounidense. El gran anuncio fueron las pruebas de que, en determinadas circunstancias, actualmente fluye agua líquida en Marte. Se resolvía así el misterio de qué provocaba una serie de manchas oscuras en determinadas zonas del planeta que aparecían con la estación cálida y se difuminaban al bajar las temperaturas. Con toda la prudencia que caracteriza a los científicos, la idea de que hay (no que hubo, sino que hay) agua salada en Marte parece firmemente asentada.
No se trata, en principio, de reservas de agua subterránea, sino de la absorción por parte de sales de perclorato de moléculas de agua de la atmósfera, y esto resulta especialmente interesante porque esas sales pueden encontrarse por toda la superficie del planeta. No es mucha agua, serían apenas unas micras de espesor, pero ahí está. "Es suficiente, los microbios no necesitan ríos ni océanos", asegura Víctor Parro, investigador científico del Centro de Astrobiología (INTA-CSIC).
Carbono y agua, pero no oxígeno
Tal y como explicaba uno de los participantes en la rueda de prensa posterior al anuncio del descubrimiento, la búsqueda de vida en Marte tiene un claro condicionante: la de la Tierra es la única forma de vida que conocemos. Por ello, lo que los astrobiólogos buscan son muestras de vida similares a las que habría en la Tierra en lugares parecidos al subsuelo de Marte.